¿A qué se dedica Dios? ¿Dios se dedica a reinar sobre toda su creación desde su reino celestial? Tal vez sea eso a lo que se dedica Dios. Lo preocupante es que los humanos no le importamos gran cosa.
Tal vez Dios se dedica a eso, a reinar sobre su creación… pero a otra escala, a una escala divina.
Todo lo que comienza tiene un final y el Universo tampoco escapa a eso. Llegará un momento en el que el Universo o se colapsa o se desintegra. Y con el Universo, el espacio, el tiempo… y Dios.
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¿A qué se dedica Dios? |
Al igual que el fin de la vida es preservarse a sí misma, lo mismo le ocurre a Dios, y a eso se dedica a asegurar su supervivencia. Su tarea es descomunal, solo al alcance de los propios dioses, pero se le puede ayudar. Dios se dedica a preservar el Universo y a crear las condiciones de que cuando éste desaparezca, otro le sustituya con una nueva simiente de un nuevo universo, nueva vida, inteligencia y otro nuevo Dios.
En este Universo, tras el colapso del anterior, gracias a las leyes físicas que existen y no por casualidad, fue apareciendo la vida y la inteligencia. En la inmensidad del universo tanto de tiempo como de espacio, han surgido muchas especies. Algunas especies, muchísimas, desde hace millones de años y en millones de galaxias, no han logrado prosperar y se han extinguido. Pero otra infinidad de ellas ha logrado alcanzar semejantes niveles de desarrollo que se pueden considerar semejantes a los dioses desde hace millones de años. De hecho, la fusión de cada vez mas superinteligencias logra crear un Dios cada vez más poderoso. Una vez que una especie ha alcanzado el nivel de Dios o se fusiona con éste, ¿a qué se dedica? Pues al último reto: a preservar el Universo y a crear condiciones favorables para el siguiente Universo. El problema es tan complejo que necesitan toda la potencia de cálculo que puedan conseguir, desde civilizaciones casi divinas, hasta la inteligencia humana y cualquier otra inteligencia animal. Para este Dios, la inteligencia es un bien muy valioso… y redundante, para asegurarse de que no le va a faltar ese recurso tan preciado.
En una galaxia como la nuestra hay 100.000 millones de soles. Es muy probable que muchísimos de ellos tengan sus planetas. Pudiera ser, es casi seguro, que en muchos hay vida. De esos, en un porcentaje menor, hay o ha habido vida inteligente. De hecho, es innegable que en esta galaxia, un planeta la tiene: el nuestro. Aunque solo haya un planeta con vida inteligente por galaxia (tal vez por eso no nos hemos topado con otra especie inteligente hasta ahora), se calcula que en el universo hay dos millones de millones de galaxias. Dios se dedica a hacer las cosas a lo grande y se asegura de que la inteligencia florezca por todo el universo, aunque sea a razón de una inteligencia por galaxia (que es lo que hasta ahora podemos conocer).
Sin embargo, algunas civilizaciones, cuando alcanzan cierto nivel bastante superior al nuestro, empiezan a jugar con ciertas cosas muy peligrosas causando serios peligros al Universo y amenazando su misma existencia: desgarros en el tejido espacio-tiempo que amenazan con destrozar la misma base del universo, descomposición contagiosa de la estructura íntima de la materia, cambio de las leyes físicas que gobiernan el Universo y sabe Dios que otras cosas que aun no logramos ni siquiera imaginar. Y a eso también se dedica Dios, a reparar estos destrozos que amenazan la existencia misma del Universo. Los experimentos que acaban con un planeta o con varios sistemas estelares, mientras no amenacen al conjunto del universo, a Dios le son relativamente indiferentes (salvo por una pequeñísima pérdida de potencia de cálculo): es un problema que cada especie debe superar para lograr integrarse mucho mas tarde y más evolucionados en lo que es Dios propiamente dicho. Y así una vez que sabemos a lo que se dedica Dios, en un futuro muy, muy, muy lejano, cuando el Universo haya colapsado, este Dios mucho más poderoso que el actual podrá decir-hacer: “hágase la luz”, y un nuevo big bang creará otro universo con las condiciones para crear vida, inteligencia… y otro Dios con el mismo fin.
¿Y la vida tras nuestra muerte? Este Dios la logra recuperar, ninguna inteligencia se desperdicia ya que la nuestra solo dura un instante comparada con la inmensidad del tiempo. ¡¡¡Quién sabe si es nuestro caso, que estemos “viviendo” en una realidad post mortem de otra vida anterior en otra realidad!!! No hay forma de demostrar ni una cosa ni la contraria, solo Dios lo sabe.
Pero aun hay mas, hay teorías sobre los multiversos o universos múltiples. El recién fallecido Stephen Hawking apunta en su último estudio a la existencia de otros universos, quien sabe si infinitos… ¿Se dedica Dios a hacer pruebas con otros Universos? ¿Hay diferentes dioses por cada universo que se dedican a hacer lo mismo?
¿Y si todo este conjunto de universos está contenido en una partícula de un átomo de otro Universo que contiene infinitos universos? ¿A qué se dedicará ese Dios? ¿O tal vez es el mismo?
Creo que este artículo es compatible con tu fe en el Dios (o los dioses, que hay muchos y no sé cuál es el tuyo) de este planeta. Simplemente este post amplia “un poco” hacia otras vistas de espacios y tiempos infinitos.